Monday, May 10, 2010

Honey 's tea

Parece que últimamente la gente se endulza en honestidad. No paramos de pedir más y más de esa fuente de verdad, que parece no tener fin. Si, sabemos que el hecho de que otras personas nos sean honestas es mucho mejor a que nos mientan u oculten la verdad (que personalmente pienso que es lo mismo) y sin embargo, muchas veces una verdad viene acompañada de sufrimiento, algo que no queríamos escuchar. O por otro lado, cuando conocemos la verdad de un asunto que nos ronda en la cabeza hace tiempo, sentimos el alivio de finalmente conocer la verdad.

Honey's tea u honesty: fuente de placer, dolor, o curación cual te de miel cuando compadecemos de gripe?

La honestidad es algo en lo que creo fuertemente. Si, fino lector, soy un poco hipócrita con esta frase, pero creo que la honestidad tiene que llegar de todas formas, tarde o temprano.
Cuando una persona es honesta con uno, sentimos que esa persona tiene confianza en nosotros, quiere que sepamos la verdad de si mismo, de lo que ha hecho, de sus costumbres, de cómo es. Una persona honesta se abre completamente para que la conozcamos. La honestidad acompaña la confianza. Creo que soy esta persona en muchos casos.

Pero reconozco que la verdad completa es una fuente de dolor también. Cuántas veces nos lastiman con la verdad? Se me ocurren muchos momentos donde hubiese preferido no conocer la verdad, donde te tiran con una explicación y sentís que venías en el carro de la vida y de repente te quedaste sin rieles al final del peñasco. Estas un segundo en suspenso en el aire y de repente te ves cayendo al vacío. El frío te recorre el cuerpo. Estás sin base, sin piso, sin rumbo. Talvez no era necesario conocer esta verdad, podría ser mejor nunca haberla escuchado. Me hace acordar a cunado los americanos dicen: "I find bliss in ignorance" (encuentro bendición en la ignorancia)

Al mismo tiempo, muchas veces encontramos confort en la verdad. Cuando estás lleno de incertidumbre por algo que no pasó, o que pasó y dejó una duda en tu vida. Cuando la verdad tapa esos vacíos, nos sentimos reconfortados.

La verdad puede quitarte o darte seguridad y no es simple encontrar una forma de mantener ambos balanceados.

No me importa si va a ser bueno o malo, si va a doler o traer placer, prefiero siempre la honestidad a tener que vivir una mentira... aunque a veces sea imposible en un momento contar con toda la verdad, prefiero esta última, aunque demore en llegar.